La directora ejecutiva de IFCO-Pastores por la Paz, Gail Walker, feliz como cada vez que nos visita, conversó con Siempre con Cuba de la firmeza de su organización comunitaria en la lucha contra el bloqueo de Estados Unidos a Cuba; de su encuentro con el presidente Miguel Díaz-Canel; de los jóvenes estadounidenses estudiantes de Medicina en la ELAM; del intercambio sostenido en el ICAP y evocó el amor por el pueblo cubano del recién fallecido amigo Bill Hill.
—–En octubre próximo nuevamente será llevado a la ONU un proyecto de resolución contra el bloqueo económico, comercial y financiero de EE.UU. contra Cuba, cerco económico condenado por el mundo en ese espacio reiteradamente y que cerrará la Jornada auspiciada por el ICAP Por la paz, contra el bloqueo y el terrorismo. ¿Pudiera comentar la participación de la organización comunitaria que dirige?
Es nuestra responsabilidad mantener la denuncia contra el bloqueo, como amigos de Cuba y también como ciudadanos del país que ha mantenido esa presión sobre el pueblo cubano por más de 60 años.
Realizaremos en Nueva York, como cada año, acciones de apoyo a Cuba en el contexto de la presentación en ONU contra el cerco económico. Es nuestro compromiso estar allí protestando cuando se escuchen voces de odio contra Cuba. Conocemos la realidad cubana, sabemos la verdad. Tenemos que hablar contra las mentiras que los odiadores perpetúan. Es nuestra responsabilidad permanecer solidarios y estamos comprometidos a seguir haciéndolo todo el tiempo que sea necesario. Deseamos recibir al canciller y a otros invitados de Cuba.
Continuaremos la batalla por el levantamiento del bloqueo para acabar con la locura que impone a la familia cubana que consideramos nuestra familia; por la exclusión de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo para arrojar luz sobre esa injusticia; y por cambiar la agresiva política del gobierno de Estados Unidos contra la población cubana cuyo ejemplo de resistencia nos hace más fuertes.
El mundo necesita que sea sólida y estrecha la relación de Estados Unidos y Cuba. El mundo tiene que saber que EE.UU. miente y que la distorsión que difunde no es la verdadera historia, la verdadera historia es la amistad entre ambos pueblos.
—–Sobre su encuentro con el presidente Miguel Díaz-Canel quien la recibió afectuosamente…
Tuve el honor de pasar un poco de tiempo con él en este viaje y le dije: cuando lo veo a usted señor presidente abrazar a esos niños, jóvenes y estudiantes palestinos que están separados de sus familias en un momento tan difícil significa para nosotros como debe ser el mundo. No puedo expresar que tan importante es el presidente de Cuba, él representa lo que nosotros sentimos, la lucha por la justicia y las causas justas. Es amigo del centro Martin Luther King y de las diferentes iglesias. Considero que también es mi presidente porque representa en lo que creemos.
(Díaz-Canel comentó a propósito del encuentro: “Pastores por la Paz simboliza lo mejor de las aspiraciones de los pueblos de Cuba y Estados Unidos. Esa lucha por un mundo mejor del reverendo Lucius Walker continúa con su hija Gail y muchos amigos de esa organización. Entre sus frutos también graduados de la Escuela Latinoamericana de Medicina ).
——En esta ocasión acompañó a dos jóvenes estadounidenses que comenzarán a estudiar en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) en Cuba
Estamos encantados de que más jóvenes sigan aprovechando el increíble ofrecimiento de becas por Fidel con el respaldo de Lucius (reverendo Lucius Walker), y hemos avanzado en ese proyecto. Los jóvenes vienen a estudiar Medicina en el entendimiento de que regresarán a Estados Unidos y allí corresponderán esa solidaridad. Vemos constantemente a estos graduados comprometidos con todo lo que aprendieron en Cuba, empeñados en cuidar a los más pequeños, a los pobres y desposeídos, a personas que no tienen la atención médica adecuada en EE.UU.
Ya son 234 los estadounidenses graduados en la ELAM y muchos de ellos están haciendo cosas tremendas en EE.UU. Es una contribución a la salud de nuestro pueblo, vemos constantemente estos ejemplos que he vivido personalmente con mis propias experiencias.
Es un regalo de Cuba del que no podemos hablar lo suficiente, estoy emocionada porque fuimos capaces de traer a dos muchachos más para participar de este programa. Estamos dispuestos a seguir organizándonos y participando de este generoso proyecto mientras Cuba esté dispuesta a recibirlos. Sentimos orgullo de ser parte de ese proceso. Somos un país con un sistema de salud con problemas así que es maravilloso contribuir a sanar a nuestra nación –como acostumbro a decir-, eso es lo que la ELAM representa para nosotros.
——También sostuvo encuentros en el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP)…
Siempre es un placer pasar tiempo con nuestros amigos del ICAP, es una extensión de nuestra casa. Me siento muy cómoda, es importante visitarlos y conversar sobre algunos de los retos que enfrentamos en Estados Unidos y como seguir fortaleciendo la relación fraternal entre nuestros dos pueblos. –
—–Durante esta visita recibió la dolorosa noticia del fallecimiento de Bill Hill, fundador de Pastores por la Paz, y el ICAP y muchos amigos cubanos manifestaron sentidas condolencias …
¡Hay tantas cosas que puedo decir de Bill Hill! Tenía un corazón tremendo y vivió una vida muy difícil, no tenía una familia amorosa, era un huérfano. Encontró su familia en el movimiento de solidaridad y encontró su hogar de muchas maneras en Cuba, a la que amaba. Creo que su espíritu vive en muchos lugares del mundo pero sobre todo en Cuba; en los jóvenes estadounidenses que estudian en la ELAM. Sentía orgullo por traerlos a estudiar, por participar en las caravanas.
La razón por la que Cuba significaba tanto para él era porque se oponía a las agresivas políticas de los gobiernos de Estados Unidos que le han hecho la vida difícil a las familias cubanas. Repetía que Cuba no hizo nada para merecer este horrible trato, este bloqueo, y expresaba: voy a hacer todo lo posible para educar a la gente sobre la realidad de la Isla, sobre el impacto de la política estadounidense y todo lo debemos hacer para levantar el bloqueo y apoyar el hermoso proyecto que es la Revolución Cubana.
Los que conocimos a Bill sabemos que en estos momentos de dolor nos diría: “dejen de llorar y hagan el trabajo”. Eso es lo que él creía y somos parte de ese compromiso.
Tomado de Siempre con Cuba