Por casi una semana, los bomberos cubanos escribieron páginas de heroísmo en la extinción del incendio de grandes proporciones en la base de super tanqueros de Matanzas. Estuvieron entre los primeros en llegar y fueron los últimos en retirarse. Desde Pinar del Río partió una dotación compuesta por siete efectivos y medios que se sumaron al enfrentamiento del siniestro sin precedentes en el país.
“Fue una tarea bien difícil. Pero la enfrentamos de conjunto todos los bomberos, como una gran familia unida y comprometida”,
Capitán Jorge Ledezma Batista, primer oficial de extinción en Pinar del Río
Con un minuto de silencio en tributo a los caídos en el cumplimiento del deber, inició la ceremonia de reconocimiento que realizaron en la sede del comité provincial del partido en Pinar del Río, donde recibieron la medalla de servicio distinguido y la condición “Elogio a la virtud” que les otorgó el ministro del interior, por la actitud valerosa y profesional que mantuvieron en las intensas y peligrosas jornadas en el cumplimiento de una misión inédita.
“La patria nos hizo un llamado una vez más. Y respondimos como nos enseñó nuestro comandante Fidel Castro, enfrentamos el incendio en la base de super tanqueros en Matanzas, y cumplimos. No nos consideramos héroes, cumplimos con nuestro deber”,
Primer Sub Oficial Armando Amador González, primer operador de equipos
La ceremonia de reconocimiento estuvo presidida por la miembro del comité central del Partido y primera secretaria en Pinar del Río Yamilé Ramos Cordero, acompañada del gobernador Rubén Ramos y el jefe del MININT en la provincia Primer coronel Julio Díaz.
Para el teniente Eduardo Menéndez Breto, jefe de carro de extinción, es un orgullo saber que cumplió con su deber, que lo hicieron con entrega total, a pesar de la magnitud del siniestro.
Fuertes emociones se vivieron en la ceremonia en la que participaron los familiares de los bomberos.
“Respetamos su decisión y le acompañamos en su desempeño. Esa es su profesión. Cuando llegó a los bomberos dijo, esto es lo mío y mantiene la decisión de seguir en ella”
Alfredo Arencibia Correa, padre de un joven bombero de 22 años.
En ellos se sintetiza la voluntad irreductible de un pueblo. Quedan recuerdos de días tristes y difíciles. De historias de valor y entrega, en las que fueron protagonistas los bomberos cubanos, que en epopéyica entrega extinguieron las llamas y se convirtieron en los héroes del momento.
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