Es posible que si habitualmente visitas páginas de viajes hayas visto que muchas de ellas incluyen mapas personalizados de Google Maps en los que señalan destinos o incluyen imágenes para identificarlos.
La función de crear mapas personalizados en Google Maps está un poco escondida, y solo se puede acceder a través de la web My Maps desde el navegador del smartphone, de la tablet o del ordenador. No hay una app móvil específica.
Nada más acceder tendrás que iniciar sesión con tu cuenta de Google (si no lo has hecho ya) y hacer clic en ‘crear un nuevo mapa’: se abrirá una nueva página con un mapa que ocupa toda la pantalla, salvo la parte superior izquierda, en la que aparece un cuadro con opciones. Es el lugar para identificarlo con un nombre y añadir una descripción.
Una de las posibilidades que incluye es la de crear varias capas (también nombrándolas) por si prefieres separar el tipo de marcadores; por ejemplo, una para monumentos, otra para restaurantes.
Lo más curioso es que puedes elegir entre nueve tipos de mapas distintos: el mapa clásico, el de vista satélite, uno de relieve, otro político, uno más físico o uno específico con el nombre de las ciudades, entre otros.
A partir de ahí, hay que ir buscando uno a uno los puntos que se quieren añadir en el mapa personalizado; todos los cambios se irán guardando automáticamente.
Hacerlo es sencillo: en la parte superior de la pantalla se sitúa un buscador en el que es necesario ir introduciendo el nombre de los puntos de interés, que aparecerán automáticamente en el mapa, e ir agregándolos y ‘enviándolos’ a la capa correspondiente.
En cada uno es posible editar el nombre, elegir un icono representativo, añadir una imagen o un vídeo y, por último, indicaciones para llegar.