A tono con el complejo escenario económico que vive Cuba, la Empresa Pecuaria Genética Camilo Cienfuegos, enclavada en el pinareño municipio de Consolación del Sur, diversifica sus producciones para lograr la eficiencia y responder a las diferentes demandas.
Según explicó a la Agencia Cubana de Noticias Denis Sixto Rodríguez, director general de la entidad, a partir del decrecimiento de la masa de ganado recurren a la compra al sector cooperativo de animales que se puedan mejorar genéticamente, y en busca de mayor resistencia a las condiciones del país.
Dedicada principalmente a la producción de animales genéticos de carne y leche -distribuidos en 38 vaquerías-, la Empresa incursiona en la crianza de búfalo y especies menores, como ovino, caprino, cunícola y avícola.
Todo ello aprovechando la infraestructura creada, por ejemplo, las instalaciones dotadas de sistemas de bombeo de agua de forma individual.
En tal sentido, Sixto Rodríguez destacó la presencia de unas 700 codornices con vistas a la puesta de huevos, y de gallinas semirrústicas en pastoreo, en tanto en los embalses prolifera la siembra de alevines.
Crear la base alimentaria constituye prioridad, a la vez un reto, teniendo en cuenta la necesidad de autoabastecerse y de poder enfrentar los periodos de escasas precipitaciones, como el actual.
Le puede interesar: Con la Patria en el corazón de Pinar del Río
El director aseveró en ese sentido que ya comienza la siembra de plantas proteicas y forraje -aparejado a la llegada de las lluvias- y tienen previsto el maíz para almacenar en silos y asumir la próxima temporada de sequía.
Asimismo, aprovechan los residuos de la empacadora de carne, sitio con el sustituyen importaciones mediante el suministro al turismo y tiendas en moneda libremente convertible; al tiempo que en numerosos consejos populares del territorio y de la cabecera provincial expenden embutidos, conformados y picadillos en moneda nacional.
Los cultivos varios constituyen otras de las producciones de la «Camilo Cienfuegos», de cara a dar respuesta a la alimentación de los cerca de 900 trabajadores y de la comunidad.
La ganadería requiere de una producción muy tecnificada, de modo que los vientos del huracán Ian se sintieron con fuerza allí en septiembre pasado, no solo por el centenar de unidades que quedaron sin cubiertas, sino porque permanecieron más de tres meses sin electricidad.
Con más de 18 mil hectáreas de extensión total, la Empresa Pecuaria Genética ostenta ciclos cerrados de reproducción, cría, ceba, sacrificio, procesamiento y empaque de la carne.
(Tomado de ACN)