La planta de impregnación de postes, ubicada en el municipio pinareño de Guane, única de su tipo en el país, volverá a trabajar con estabilidad luego de cuatro años de producciones muy limitadas por la falta de las sales hidrosolubles, que se utilizan en la preservación de la madera.
La llegada de los primeros contenedores de esa materia prima asegura el reinicio de las labores de una industria estratégica para el mantenimiento de las redes eléctricas y telefónicas.
El objetivo es la elaboración de unos 7 500 postes en lo que resta de 2023.
Además, a partir de una alianza con el grupo empresarial Tabacuba, también se dará tratamiento a la madera que se emplea en la construcción de las casas de cura de tabaco, para alargar su vida útil.
Francisco Díaz Roque, director de esta unidad empresarial de base, perteneciente a la Empresa Agroforestal Macurije, explicó que desde ahora y hasta diciembre serán 4 000 metros cúbicos de horcones y otros elementos.
La impregnación de estas piezas hará que puedan durar alrededor de 15 años más de lo que resistirían normalmente.
Le puede interesar: Pinar del Río: el empeño constante de trabajar para el pueblo en Guane
Para 2024, con los preservantes que importará la agroforestal Macurije y los que debe recibir a través de los encadenamientos productivos con la Unión Eléctrica, Etecsa y Tabacuba, se debe estabilizar una producción de 15 000 postes anuales y 10 000 metros cúbicos de madera para la infraestructura tabacalera.
Aunque la capacidad de la industria es de unos 30 000 postes anuales, las limitaciones económicas derivadas de la COVID-19 y el bloqueo del Gobierno de EE. UU. contra la Isla llevaron a su paralización parcial.
En el año 2022, por ejemplo, solo se produjeron en la planta 1 700 postes, y en lo que va de 2023 apenas se habían obtenido 680.
Sin embargo, gracias a las alianzas y a la implementación de un esquema financiero que le permite a la agroforestal pinareña reinvertir parte de las divisas que obtiene en otras actividades para fomentar su desarrollo, se prevé que la planta de impregnación pueda trabajar con sostenibilidad.
Tras un proceso de modernización que concluyó en 2009, esta instalación ha aportado alrededor de 300 000 postes eléctricos y telefónicos de probada calidad y diferentes dimensiones, desde los 7,5 metros hasta los 15.
(Tomado de Granma)
