Te invitamos a ponerte ropa cómoda, zapatos deportivos, cubrirte con gorra o sombrero y con la mochila a la espalda, emprender el viaje hacia el destino de hoy: San Diego de los Baños
Justo al pie de la Cordillera de Guaniguanico, se ubica el pueblo de San Diego de los Baños, famoso desde el siglo XVIII por las propiedades benéficas de sus aguas.
Cuenta la leyenda que un esclavo enfermo probó las aguas sulfurosas del río y milagrosamente se recobró de sus dolencias.
Enclavado en un entorno de gran belleza natural, en el municipio de Los Palacios, existe aquí uno de los más reconocidos balnearios del país.
La historia recoge que en 1891 se instauró en el lugar el primer baño natural permanente, y a mediados del siglo XIX se construyó la instalación con 8 piscinas artificiales y 24 bañeras, que recibía a miles de turistas al año, con múltiples afecciones.
Sus aguas han sido estudiadas y clasificadas en sulfuradas, sulfatadas, cálcicas, magnesianas, fluoruradas y termales.
En las proximidades del pueblo hay sitios de interés para el visitante, entre ellos el Parque La Güira y la Cueva de los Portales, ellos también pueden ser uno de tus destinos si andas por la zona.
