Te invitamos a ponerte ropa cómoda, zapatos deportivos, cubrirte con gorra o sombrero y con la mochila a la espalda, emprender el viaje hacia el destino de hoy: la Gran Caverna de Santo Tomás.
En los impresionantes escenarios de Viñales, se ubica el mayor sistema cavernario de Cuba, con unos 45 kilómetros explorados y uno de los mayores de América. Sus múltiples espeluncas están colmadas de formaciones cársicas que poseen varios niveles de altura donde es posible apreciar fósiles pleistocenos y una belleza natural incomparable.
En el año 1954, 14 años después de la fundación de la Sociedad Espeleológica de Cuba, comenzaron las investigaciones subterráneas en la Sierra de Quemados.
Las cuevas abiertas eran solo conocidas hasta entonces por los campesinos de la región en algunas de sus bocas y galerías iniciales.
Sus galerías recorren siete niveles diferentes y en visita guiada se permite acceder a 42 metros por debajo de la tierra hasta la sexta galería, aquí es donde están las fantásticas formaciones de piedra caliza, las estalactitas y estalagmitas, los lagos subterráneos y las vastas cavernas.
Luego de sortear empinados senderos se llega a la cueva de La Lechuza, una de las formaciones más impresionantes del sistema cavernario. En ella se puede ver la rana de cueva más grande del mundo.
El 5 de junio de 1989, día mundial del medio ambiente y mediante Resolución No. 59 la Gran Caverna de Santo Tomás fue declarada Monumento Nacional.
Sus pasadizos acogen a viajeros nacionales y foráneos interesados en buscar las escenas del mundo subterráneo en Viñales, sitio considerado Patrimonio de la Humanidad en la categoría de Paisaje Cultural. Si aún no lo has visitado, este pudiera ser tu próximo destino.
