El aniversario 67 del III Frente Oriental Dr Mario Muñoz Monroy, «nacido de la concepción revolucionaria y del espíritu de ofensiva de Fidel», tal y como afirmó su jefe y fundador, Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque, fue conmemorado por los pobladores del hoy municipio de la provincia de Santiago de Cuba.
Ofrendas florales enviadas por el Líder de la Revolución, General de Ejército, Raúl Castro Ruz; el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; del Presidente de la Asamblea Nacional y del Consejo de Estado, Esteban Lazo Hernández; y una a título del pueblo de Cuba, fueron depositadas en el Mausoleo del III Frente, en la Loma de La Esperanza.
La ceremonia estuvo encabezada por los miembros del Comité Central del Partido, Beatriz Johnson Urrutia, y el General de División Eugenio Armando Rabilero Aguilera, Jefe del Ejercito Oriental y Primera Secretaria de la organización en la tierra indómita, así como otros dirigentes políticos y gubernamentales, y contó con la participación de pobladores de la serranía, que tradicionalmente realizan el homenaje.
Virgen Grabiela Rodríguez Velázquez, estudiante de la enseñanza media, aseguró que a pesar del complejo escenario que hoy enfrenta la nación, los jóvenes continúan cumpliendo con la palabra empeñada, con compromiso y lealtad a la continuidad de la Revolución y a aquella generación que, a riesgo de sus propias vidas, limpió de opresión y deshonra el alma de la Patria.
Tampoco faltó el tributo popular al Comandante de la Revolución, Juan Almeida Bosque, al colocar innumerables flores sobre el sepulcro de granito rojo, custodiado por Estudiantes de la Escuela Militar Camilo Cienfuegos del municipio Contramaestre.
La tiranía batistiana perpetró 320 bombardeos y ametrallamientos aéreos contra el territorio del Frente -que alcanzó unos seis mil kilómetros cuadrados-, pero no impidió su avance y su victoria en más de 200 acciones combativas. «Cumplió con honor la misión que le designó el Comandante en Jefe y fue uno de los puntales de la victoria definitiva del pueblo cubano», rememoró años después Almeida Bosque.
(Tomado de Granma)
